Ahora que se acerca Septiembre...

Empezamos la cuenta atrás para la vuelta al cole y empiezan las prisas de última hora para tenerlo todo listo para su primer día de clase. Libros, mochilas, material escolar..., a veces pienso que nuestros hijos tienen que ser Rambo para cargar con tanto peso, o igual los profes se piensan que semejante petate es como la mochila mágica de Dora La Exploradora. Alucinadita me quedé cuando le fui a buscar los libros al mío de tres años...casi no podía ni yo con ellos!
Este año mi peque se estrena como alumno...Hasta ahora estuvo al cobijo de una servidora, pero ya llega el día en que abandone el nido y conozca el "otro mundo". Aquel en el que se tendrá que desenvolver solito, y en el que irá creciendo como persona. La verdad es que me da miedo el sólo pensar que no voy a poder estar a su lado y quisiera poder tener un agujerito para ver cómo lo hace. Tengo pánico imaginando que será un miniyo que tendrá que pasar por lo mismo que pasé en mi infancia ( Dios, o, mejor dicho, los profesores, no lo permitan )...sólo espero que no sea ese el caso.
 La cuestión es que va a conocer a un montón de niños ( 25 en su clase, ahí es nada ) y ya se sabe que, a veces, te puedes topar con esos dos o tres elementos que les hacen la vida imposible a los demás sólo por destacar o porque no quieren que tú lo hagas ( en mi caso me hacían bulling por tener buenas notas ).
Supongo que como cualquier madre, me preocupo por estas cosas, que igual son paranoias mías y resulta que al final fueron todos felices y comieron perdices, pero no sé porqué en la vida real no siempre se dan ese tipo de finales ( definitivamente Walter Elías Disney tenía una imaginación portentosa ).
Lo dicho...que este año creo que iba a ver Dora en plan Rambo si no fuera por que inventaron las mochilas con ruedas...